La narrativa sobre la guerra de Ucrania, y el genocidio de Gaza:el doble rasero de Occidente

 

Galde 44, Udaberria 2024 Primavera.Victor Pozas.-

Desde principios de este siglo millones de personas han muerto en el gran Oriente Medio y África, víctimas de guerras ilegales, impulsadas por EEUU y sus aliados, que también provocaron la violación masiva de los DDHH y el éxodo de millones de refugiados en medio de un silencio cómplice por parte de gobiernos y medios occidentales.

En cambio en la guerra de Ucrania, multiplicada por la ilegal y criminal invasión rusa, los medios y los gobiernos occidentales han actuado de forma diferente, informaron con profusión en el primer año y exigieron responsabilidades por los crímenes de guerra del ejército ruso. Gobiernos y entidades internacionales han sancionado a Rusia y han dado un fuerte apoyo militar y financiero a Ucrania.

Todo lo contrario de lo que están haciendo frente a las masivas violaciones de los DDHH y a los crímenes de guerra que Israel está cometiendo contra la población palestina gazatí.

Ese contraste brutal por parte de medios, gobiernos y entidades occidentalesme lleva a reflexionar sobre su comunicación y respuestas no solo en la guerra de Ucrania, sino también en las Guerras contra el Terror y en la actual guerra de limpieza étnica de Israel contra Palestina.

Para este recorrido me guíopor las aportaciones de cuatro autores: Arthur Ponsonby[1],Anne Morelli[2], y Edward H. Herman y Noam Chomsky[3],que coinciden en señalar varios principios de manipulación presentes en la propaganda de guerra como estrategias de demonización,deshumanización y miedo, estrategias humanitarias y estrategias de selección y silencio, todas ellas combinadas de acuerdo a las circunstancias y al momento.

Las Impunes Guerras contra el Terror (2001-2021)

La manipulación y el engaño masivo y burdo (aniquilar Al Qaeda en Afganistán e invadir Irak por la posesión inexistente de armas de destrucción masivas) fueron las estrategias empleadas por EEUU y sus aliados para lanzar las Guerras contra el Terror en Oriente Medio y África (Afganistán,Pakistán, Irak, Libia, Siria, Yemen y Somalia).

Esas guerras tuvieron terribles consecuencias para los países y pueblos que las sufrieron[4], consecuencias silenciadas por los grandes medios, por los propios gobiernos occidentales que las promovieron y por las instituciones internacionales, y desconocidas por la opinión pública mundial.

Al silencio de los medios occidentales sobre la muerte y destrucción provocada por las Guerras contra el Terror, hay que añadir el que nunca denunciaron a los gobernantes de EEUU y a sus aliados por las invasiones, ocupaciones y bombardeos ilegales de los países citados y por los numerosos crímenes de guerra que allí se cometieron. Y tampoco pidieron sanciones al respecto o que la Corte Penal Internacional iniciara alguna investigación sobre lasgravísimas ilegalidades cometidas por los gobiernos occidentales. Y con el silencio llegó la impunidad para los crímenes de Occidente.

La “bella” narrativa de la respuesta de Occidente a la invasión rusa de Ucrania

La cobertura inicial de los principales medios occidentales fue intensa y masiva. Como ejemplo, la cobertura de las principales cadenas de TV estadounidenses ABC, CBS y NBCsobre la invasión rusa de Ucrania en 2022 fue mayor que en el inicio de la invasión estadounidense de Afganistán en 2001 y de Irak en 2003 [5].

Pero la cobertura y la información han sido parciales y sesgadas, poniendo su confianza en fuentes oficiales y secretas de Ucrania, EEUU y Reino Unido. Se han ocultado cifras fiables de lo que ocurre en el campo de batalla. Se ha estigmatizado como “putinista” a quien osara disentir de la línea oficial promovida por EEUU, la OTAN y la UE. Se ha resucitado hasta extremos ridículos la rusofobia. Se ha carecido de espíritu crítico sobre las respuestas belicistas de la UE y de la OTAN a la invasión rusa y se ha trazado, sobre todo en el primer año y medio de guerra, la victoria militar como objetivo propagandístico principal, lo cual en estos momentos de dificultades sobre el terreno comienza a plantear serias dudas y problemas

Hay sin embargo aspectos sorprendentes en la respuesta de amplia acogida que Occidente y especialmente la UE dio a millones de personas refugiadas ucranianas. Sorprendentes porque en pocas semanas esos millones de personas blancas,rubias y europeas fueron acogidas sin mayores problemas, echando por tierra la propia posición de la UE sobre la imposibilidad de acoger a las cientos de miles de personas negras y morenas, procedentes de África, Asia y América Latina que llegan a Europa cada año.

Llama también la atención la unanimidad y la rapidez con las que medios y especialmente gobernantes occidentales han condenado la invasión rusa de Ucrania, han denunciado justamente los crímenes de guerra cometidos por el ejército ruso, han recurrido a instancias internacionales como la Corte Penal Internacional para que juzgaran a los dirigentes rusos responsables de estos crímenes, han conseguido la condena del presidente Putin por la deportación ilegal de niños de Ucrania a Rusiay han impuesto cientos de sanciones económicas y financieras a Rusia. No ha habido impunidad total para Rusia.

Pero todos esos éxitos reposan sobre un pilar muy débil, que ha sido el corazón de la propaganda occidental: la sinceridad de su defensa de los valores occidentales y de la propia democracia en Ucrania, sinceridad que ha sido puesta a prueba en el infierno actual de Gaza.

Esos valores (democracia, libertad individual, DDHH y estado de derecho), citados por ocho presidentes europeos[6] en apoyo de la invasión de Irak, la acción más mortífera y criminal -en palabras de Chomsky[7]– en lo que llevamos de siglo, fueron pisoteados en las Guerras contra el Terror y de ahí arranca la desconfianza de la mayor parte del mundo sobre la defensa de esos valores por Occidente. Y ahora están siendo triturados en Gaza.

El genocidio de Gaza revela el doble rasero de Occidente

La narrativa de cómo Occidente respondió a la agresión rusa en Ucraniaha sido desnudada y borrada por el propio comportamiento de los gobiernos occidentales frente al genocidio gazatí.

Los medios de comunicación y los gobiernos de EEUU, Reino Unido y de la UE no han denunciado, como hicieron en la guerra de Ucrania, los crímenes de guerra israelíes: la matanza de 34.570 civiles, 14.350 niñas y niños, 8620 mujeres,130 periodistasy 326 profesionales de salud, el desplazamiento forzoso, bajo bombardeos, de cerca de dos millones de personas, la destrucción total o parcial de 341.000 casas, 256 centros sanitarios,406 escuelas,603 mezquitas, 3 iglesias, 1920 instalaciones industriales y 199 edificios históricosy la detención de más de 3000 personas[8].

Tampoco han recurrido a instancias internacionales para que juzguen a Israel por estos crímenes, ni le han impuesto sanciones, como sí hicieron con Rusia.Y por ahora Israel sigue impune gracias al apoyo estadounidense.

Pero este doble rasero de Occidente ha quedado desenmascarado,como nunca antes. La participación de Estados Unidosy la complicidad, minimización y silencio de la mayor partede Europa -con pequeñas excepciones- en el genocidio y la limpieza étnica que Israel ejecutaen Gaza, cuestiona irremediablementela sinceridad del discurso de EEUU-Europa-Occidente sobre su defensa de la democracia, la libertad, la legalidad internacional y los DDHH.

Ademásenvía un mensaje que puede ser entendido por gobiernos no occidentales como el momento para alejarse definitivamente de unos valores y unas normas violadas por los mismos países de Occidente que las promueven solo contra sus enemigos. Aunque también podría ser la ocasión para que gobiernos del Sur Global se alzaran como defensores de las mismas y exigieran su cumplimiento total por parte de Occidente, como ya está comenzando a ocurrir conlas iniciativas de Sudáfrica y Chile al acudiral Tribunal Internacional de Justicia y a la Corte Penal Internacional para que investiguen y juzguen a Israel. Si esto fracasa y no se para a Israel, los DDHH y la legalidad internacional habrán recibido un golpe mortal.

Victor Pozas. Experto en comunicación y RR.II. Profesor jubilado de la UPV/HU

Notas:

  1. Arthur Ponsonby, Falsehood in War-Time, Containing an Assortment of Lies Circulated Throughout the Nations During the Great War ,1928.
  2. Anne Morelli ,Principios elementales de la propaganda de Guerra, Hondarribia:Hiru,2001
  3. Edward H. Herman y Noam Chomsky, Manufacturing Consent: The Political Economy of the Mass Media,New York: Pantheon Books, 1988.
  4. https://watson.brown.edu/costsofwar/figures/2021/WarDeathToll
  5. Jim Lobe, “Networks covered the war in Ukraine more than the US invasion of Iraq,” Responsible Statecraft, April 8,2022https://responsiblestatecraft.org/2022/04/08/networks-covered-the-war-in-ukraine-more-than-the-us-invasion-of-iraq/,
  6. Eight European Leaders Voice Their Support for U.S. on Iraq, 30.January 2003 https://www.wsj.com/articles/SB1043875470158445104
  7. N. Chomsky, “The Worst Crime of the 21st Century”, 12 May 2023https://www.currentaffairs.org/2023/05/the-worst-crime-of-the-21st-century
  8. https://euromedmonitor.org/en/article/6176/Statistics-on-the-Israeli-attack-on-the-Gaza-Strip-%2807-October—23-February-2024%29

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