Galde 24, (udaberria/2019/primavera). Jeremy Brecher.- 1
A semejanza de lo que fue el New Deal impulsado por la administración Roosevelt en los años 30, el Green New Deal (GND) (Nuevo Pacto Verde en español) -presentado recientemente por la congresista Alexandra Ocasio-Cortez (D-NY) y el senador Ed Markey (D-Mass.)- representa la propuesta con la que el Partido Demócrata pretende hacer frente a la crisis económica y enfrentar al mismo tiempo la amenaza del cambio climático. Desde Galde hemos querido acercarnos a esta propuesta y darla a conocer, resumiendo para ello un texto publicado recientemente en diversos medios digitales por Jeremy Brecher.
Movilizar al gobierno
El calentamiento global se ha llamado, con razón, el “mayor fracaso del mercado” en la historia. Por tanto, corregirlo no se puede confiar al mercado. El GND necesitará una planificación económica audaz, así como políticas industriales e inversión pública para guiar y facilitar el proceso. Necesitará también políticas macroeconómicas de pleno empleo, que aseguren la prosperidad y fomenten un uso eficiente de los recursos económicos durante la transición. Y necesitará la movilización pública y la redirección de los recursos humanos y materiales que se requieren para esa transición. En definitiva, el GND requiere instituciones gubernamentales específicamente diseñadas para implementar la transición hacia la protección del clima.
Establecer agencias gubernamentales para supervisar la transición
La movilización para el GND es una emergencia. Por ello, las agencias del Green New Deal, establecidas por el Congreso, recaudarán capital, desarrollarán estrategias de creación de empleo, organizarán el financiamiento para infraestructuras,financiarán la investigación y el desarrollo, establecerán y controlarán los estándares de eficiencia energética para edificios, electrodomésticos y equipos, capacitarán continuamente a trabajadores y profesionales, establecerán políticas de ubicación industrial, y coordinarán las actividades multifacéticas de agencias federales, gobiernos estatales y municipales, corporaciones y organizaciones de la sociedad civil. La iniciativa del gobierno es necesaria para eliminar la inercia, los cuellos de botella y la burocracia. La protección del clima requiere la capacidad de hacer planes a largo plazo que afecten muchos aspectos de la vida. Requiere tomar decisiones, así como capacidad técnica para diseñar y desarrollar tales sistemas complejos. Requiere asimismo tener en cuenta una amplia gama de factores económicos, ambientales y sociales, maximizando los efectos secundarios beneficiosos y minimizando los no deseados.
Usar los poderes de regulación para congelar, eliminar gradualmente y reemplazar toda la infraestructura de combustibles fósiles
En 1942, el presidente Franklin Roosevelt prohibió la producción de automóviles de pasajeros para permitir la reorganización de la industria para la producción de guerra. Los objetivos del GND requieren una disminución similar, aunque más gradual, en la producción y el uso de combustibles fósiles y su reemplazo por otras fuentes de energía. Tal transición debe ser ejecutada por los poderes regulatorios gubernamentales. Los estándares estatales de cartera renovable (RPS) proporcionan un ejemplo. Un RPS nacional debe requerir el reemplazo de energía de combustibles fósiles por energía renovable según la tasa anual necesaria para cumplir con los objetivos del GND. Se deben desarrollar estándares similares para la conversión del transporte, edificios, industria y todos los demás sectores productores de Gases de Efecto Invernadero (GEI).
Establecer agencias del Green New Deal para reorganizar los sectores económicos
Una economía libre de fósiles requerirá la transformación no solo de los lugares de trabajo, de cada empresa y de la economía en general, sino de industrias y sectores económicos específicos. La planificación en la industria es necesaria para generar sinergias y economías de escala, establecer áreas equilibradas de actuación y garantizar que las diferentes partes de un sistema emergente de protección del clima trabajen juntas, con una coordinación a gran escala y a largo plazo que no puede ser ejercida por el mercado. Las políticas públicas sobre el clima, la negociación colectiva en toda la industria y la cooperación entre empresas en la misma industria deben ir de la mano.
Un buen ejemplo de esa cooperación fue la reconstrucción de la industria automotriz de los Estados Unidos bajo el plan de recuperación económica del Presidente Obama. Las corporaciones del automóvil y el Sindicato de Trabajadores del Automóvil (UAW) acordaron un gran aumento a largo plazo de la eficiencia energética para reducir las emisiones de carbono. El resultado fue una disminución constante en las tasas de contaminación, un aumento en los empleos para los trabajadores del automóvil, y el fin de la crisis que amenazaba con eliminar casi la producción de automóviles en los Estados Unidos.Programas sectoriales similares se necesitan en electricidad, transporte, agricultura, silvicultura, manufactura, manejo de desechos, finanzas y muchas otras industrias.
Utilizar las herramientas de política macroeconómica
En los años 30, el New Deal utilizó las herramientas de la planificación macroeconómica para dirigir la economía en su conjunto. Para combatir el desempleo y apoyar los programas del New Deal, se utilizó la política fiscal, con déficits presupuestarios, y la política monetaria, con bajas tasas de interés. Si bien el neoliberalismo condenó las políticas macroeconómicas keynesianas diseñadas para proporcionar el pleno empleo, el abandono de tal dirección condujo a la crisis económica más profunda desde la Gran Depresión, a una creciente polarización de los ingresos y a un mayor empobrecimiento de los trabajadores. El GND debe aplicar políticas macroeconómicas que aseguren el pleno empleo para reducir el temor de que la protección del clima pueda amenazar la prosperidad, y también para dar a los trabajadores una mayor participación en la transición.
Usar los poderes del gobierno para rectificar injusticias pasadas y presentes
Los trabajos que protegen el clima deben ponerse a disposición de aquellas personas con dificultades para acceder a buenos empleos. Debe efectuarse una discriminación positiva que tenga en cuenta raza, género, edad y ubicación para contrarrestar nuestras desigualdades laborales actuales. Los programas requerirán estándares para la contratación local y para las empresas comerciales minoritarias. Asimismo, los proyectos del GND deberán reducir la concentración de la contaminación en comunidades marginadas y de bajos ingresos y contrarrestarán la falta de transporte, educación, salud y otros servicios en los vecindarios pobres.
Proteger a los consumidores de energía de bajos ingresos
Los costos actuales de energía de combustibles fósiles son en sí mismos una fuente importante de pobreza y desigualdad económica. El GND debe garantizar que la factura energética de las familias de bajos ingresos sea asequible, definiéndola de manera general como el 6 por ciento de los ingresos brutos del hogar. La combinación de inversiones en energía solar, eficiencia y climatización reducirá la cantidad de asistencia necesaria; en muchos casos, la factura estará por debajo del seis por ciento de los ingresos, eliminando la necesidad de asistencia. Todas las nuevas viviendas con bajos ingresos, públicas o con subsidio público deberán ser de energía neta cero con paneles solares dentro y fuera de las mismas.
Potenciar las iniciativas lideradas por la comunidad
Hoy, una gran franja de programas comunitarios, locales y regionales ya están comprometidos en promover la transición a una economía y sociedad con un clima saludable. Incluso en una transición dirigida por el gobierno, pueden, por iniciativa propia, implementar la producción de energía renovable basada en la comunidad, como las placas solares en los techos, las medidas de reducción del uso de energía como la climatización residencial, la movilización financiera a través de fondos de inversión comunitarios y los nuevos patrones de consumo, como bicicletas compartidas. Quizás lo más importante es que pueden proporcionar tanto la participación popular en la transición a la protección del clima como los medios para controlar la responsabilidad de las instituciones de transición.
Democratizar la democracia
Las agencias del Green New Deal deben cumplir con el más alto nivel de transparencia y estar sujetas a los inspectores generales internos, a la Oficina de Contabilidad del Gobierno y a sus equivalentes especializados. Una agencia de supervisión independiente del poder ejecutivo, debe supervisar a las agencias e informar al Congreso y al público sobre su progreso, identificar problemas y fallas e iniciar las correcciones necesarias.El GND debe establecer estándares para los planes de acción sobre el clima, determinados democráticamente en todos los niveles, y similares a las declaraciones de impacto ambiental legalmente exigidas por muchas leyes sobre el medio ambiente. El GND debe alentar a los grupos de la comunidad local, las coaliciones y los gobiernos a desarrollar e implementar sus propios planes de acción sobre el clima a nivel comunitario y exigir dichos planes en todos los proyectos que se financian.
Movilizar a los trabajadores
Para movilizar el Green New Deal (GND) se requerirán millones de trabajadores. Durante la Segunda Guerra Mundial, la Junta de Trabajo de Guerra reclutó activamente trabajadores para las regiones e industrias donde más se necesitaban y el gobierno asumió el papel principal en la rápida expansión de la educación, la capacitación, el cuidado infantil y la vivienda para la nueva fuerza laboral. Hoy en día, una reserva laboral de más de 20 millones de personas desempleadas, subempleadas o fuera de la fuerza de trabajo podría estar disponible para trabajar en la protección del clima. El GND deberá hacer coincidir a estos trabajadores con los sectores de empleo donde se necesitan y hacer coincidir los trabajos con las necesidades de los trabajadores.
No abandonar a nadie y garantizar empleos para todos
Si bien la protección del clima producirá muchos más empleos de los que elimina, también puede amenazar los de algunos trabajadores de las industrias que producen y utilizan combustibles fósiles. Es injusto que cualquier persona sufra las consecuencias de una política que es necesaria para proteger a la sociedad. Por ello, el Green New Deal debe crear empleos y / o medios de vida alternativos para enfrentar el desempleo y evitar la oposición de algunos sectores a esas políticas.
La protección de los trabajadores amenazados y de las comunidades que dependen de los empleos basados en combustibles fósiles debe plantearse antes de que comience la reestructuración económica. El Green New Deal deberá crear nuevos fondos para reemplazar los impuestos y tarifas pagados por las instalaciones de combustibles fósiles e invertir en buenos empleos en las comunidades afectadas
Asegurar los derechos de los trabajadores y el empleo digno
El Green New Deal debe incluir estándares salariales que proporcionen una vida digna y un futuro para las familias trabajadoras. Debe respaldar las disposiciones salariales vigentes, como las exigidas por la Ley Davis-Bacon, y los acuerdos laborales de proyectos negociados entre los sindicatos y los empleadores, para garantizar que los empleos de protección del clima mejoren, en lugar de reducir, los salarios y las condiciones laborales.
El Green New Deal, como el New Deal original, debe establecer un nuevo marco que proteja los derechos humanos y constitucionales fundamentales de los trabajadores, reforzando los derechos a expresarse libremente, organizarse, negociar colectivamente y participar en acciones concertadas.
Movilizar dinero y recursos materiales
Cuando las personas oyen hablar sobre el Green New Deal, es probable que se pregunten “de dónde vendrá el dinero”. Temen que los costos sean enormes y que tengan que soportar esa carga a través de impuestos más altos. Sin embargo, una economía libre de combustibles fósiles será mucho más barata que el modelo actual. Además, se puede corregir nuestra extrema desigualdad mediante impuestos a los ricos para ayudar a pagar la protección del clima. Hay que tener en cuenta asimismo los enormes recursos de la industria de combustibles fósiles que deberían ser usados para pagar por el daño que le han hecho a la tierra y a cada uno de sus habitantes. El GND podrá utilizar los beneficios financieros de la energía libre de fósiles, los billones de dólares que se otorgan a las corporaciones y a los ricos en exenciones fiscales y subsidios, y la riqueza de la propia industria de combustibles fósiles para garantizar que los estadounidenses comunes se encuentren en mejores condiciones, como resultado de la transición a la seguridad en el clima.
Capturar los beneficios de la transición a la energía libre de fósiles
La energía libre de fósiles es ahora rentable: es más barata y ofrece más beneficios que la quema de combustibles fósiles. A largo plazo, la protección del clima se pagará sola.
En la actualidad, las grandes inversiones se destinan a mantener, reemplazar y ampliar la infraestructura de combustibles fósiles. El GND redirigirá ese flujo de inversión para construir una economía libre de fósiles, reemplazando los empleos de energía perdidos y otros programas del GND. Del mismo modo, todo el dinero que se habría gastado en carbón, petróleo y gas puede ir a los bolsillos de los consumidores y ayudar a pagar el GND.
Hacer pagar a los contaminadores
La industria de los combustibles fósiles puede y debe soportar gran parte de la carga por el daño que causa a la humanidad y al planeta a través de impuestos, tarifas, costos de permisos y otros cargos que pueden utilizarse para pagar el GND. La política fiscal puede ayudar a desalentar las emisiones de carbono al tiempo que revierte nuestra creciente desigualdad de ingresos. Los impuestos progresivos, en particular sobre los bienes de lujo que producen cantidades ingentes de carbono como los jets privados, pueden contrarrestar los efectos negativos sobre la igualdad de ingresos. Otra fuente potencial para financiar la transición a la seguridad climática pueden ser las sanciones legales y multas cobradas a las corporaciones por prácticas dañinas en el medio ambiente. El GND debe incluir legislación para responsabilizar a los productores y emisores de combustibles fósiles por los daños colosales infringidos a la atmósfera, y el colosal costo de remediarlo.
Recortar gastos costosos e innecesarios
El gasto militar de los Estados Unidos equivale al de los siguientes siete países juntos. Aparte del despilfarro que ello supone, ha servido para apoyar una serie de guerras, muchas de ellas ilegales según las leyes nacionales e internacionales, ninguna de las cuales ha tenido éxito, causando un daño humano y material incalculable y sin que ninguna haya contribuido a la seguridad del pueblo estadounidense. Muchas de estas guerras han sido motivadas por la búsqueda de combustibles fósiles y todas han contribuido al calentamiento global. Enfrentar el cambio climático reducirá los conflictos y promoverá la paz y la seguridad mundiales. La transferencia de fondos del presupuesto militar al GND mejoraría la seguridad de los individuos y de nuestro país.
Movilizar la inversión
Los préstamos públicos a través de la venta de bonos pueden proporcionar fondos sustanciales -y económicos- debido a la capacidad de la Reserva Federal para comprar bonos de infraestructura pública a tasas bajas. Los bancos con fines públicos, las cooperativas de crédito y los fondos de inversión y préstamos pueden proporcionar recursos financieros más descentralizados, especialmente para proyectos de menor escala y basados en la comunidad. Si es necesario, la Reserva Federal podría comprar bonos de infraestructura, tal como lo hizo con los valores del Tesoro en 1940 para financiar el esfuerzo de guerra.
Asimismo, el GND establecerá un programa de bonos sobre el clima, como los bonos de guerra de la Segunda Guerra Mundial. Estos deben ser una buena inversión para las personas, en particular como una alternativa a los planes de pensiones hoy destruidos o amenazados. Si vamos a subsidiar la inversión en energía, los beneficios deberían ir primero -y ante todo- no al 1%, sino a los ciudadanos comunes que puedan usarlos para aumentar su seguridad económica y sus ahorros para la jubilación.
Apoyar y financiar un Global Green New Deal
La realización de los objetivos del GND requiere una cooperación global. Los gobiernos deben trabajar juntos para crear un marco global que respalde los empleos y el desarrollo respetuosos con el clima, lo que se ha denominado un “Nuevo Acuerdo Verde Global”. Eso requiere que el mundo abandone el neoliberalismo y adopte una nueva estrategia que ponga en funcionamiento los recursos humanos del mundo, dando respuesta a la acuciante necesidad de una transformación económica que reduzca radicalmente las emisiones de Gas de Efecto Invernadero (GEI).
Es necesario un fondo de inversión global para la protección del clima, a una escala que movilice los recursos humanos y materiales subutilizados en todo el mundo. En lugar de luchar entre sí por empleos que protegen el clima, los trabajadores de diferentes países podrían beneficiarse de las políticas nacionales y los acuerdos internacionales que alienten a los países a cooperar para compartir tecnologías verdes y expandir la producción para la protección del clima. Los acuerdos internacionales legalmente vinculantes deben eliminar y prohibir el uso de combustibles fósiles en todo el mundo. Tanto la protección del clima como la cooperación económica requieren, en última instancia, la desmilitarización y políticas de seguridad comunes a nivel mundial.
La globalización, el neoliberalismo y los acuerdos de libre comercio han enfrentado a los trabajadores del mundo en una lucha por empleos que protegen el clima. El GND no enfrentará a trabajadores con trabajadores y se opondrá, tanto a la escalada de guerras comerciales, como a la utopía de libre comercio del neoliberalismo. En su lugar, buscará un comercio administrado conjuntamente que aliente a todos los países a desarrollar sus industrias y tecnologías de protección del clima lo más rápido posible, al tiempo que permitirá que los beneficios se compartan de una manera que proteja a los trabajadores tanto en los países en desarrollo como en los países desarrollados o, lo que es lo mismo, al planeta en su conjunto
Conclusión
El New Deal original de la década de 1930 no fue un solo programa, o una norma legislativa. Representó toda una época de agitación en la que las fuerzas en conflicto intentaron enfrentar una crisis devastadora y dar forma al futuro de la sociedad estadounidense. El New Deal era parte de un proceso de cambio social que incluía la experimentación a nivel estatal, regional y local, la organización entre los grupos de trabajadores, desempleados, rurales, urbanos, ancianos y otros grupos de base, así como un animado debate sobre alternativas futuras que fueron mucho más allá de las políticas implementadas.
En la práctica, el GND involucrará de manera similar ideas y programas en disputa, impulsados, en alianza y oposición, por una amplia gama de grupos y organizaciones que apoyan el concepto amplio, pero no están de acuerdo con los detalles. Al igual que el New Deal original, el Green New Deal está tratando de hacer algo que nunca se ha hecho antes. Tendremos que aprender de la experiencia, y corregir los errores que inevitablemente cometeremos en el camino. Pero con esta estrategia podemos comenzar a caminar en la dirección correcta.
Notes:
- Jeremy Brecher es historiador, cineasta, y cofundador de Labor Network for Sustainability. ↩